Maria Mitchell fue la primera mujer astrónoma de Estados Unidos. Nació en Nantucket Island en 1818. Su familia pertenecía a los Quakeros, quienes, de forma muy poco covencional para la época, insistieron en dar una educación de calidad similar a la que se proporcionaba a los chicos. Su padre, Guillermo, enseñó astronomía y navegación celeste a sus diez hijos, de los cuales María era la tercera.